La activista por los derechos de los animales, Karla Capalli volvió a protestar fente al Coliseo de Puerto Rico junto a un grupo de personas por la llegada al país del circo Ringling Brothers . La activista acusa al circo de maltrato contra los animales que utiliza en sus espectáculos, entre los que se encuentran elefantes y tigres.
No hay que ser demasiado listo para conocer que en el entrenamiento de estos animales se utiliza el maltrato para lograr que hagan estupideses que entretengan a gente sin escrúpulos. Muchos asisten a estos circos principalmente atraídos por los espectáculos con animales sin conocer el proceso de maltrato y privaciones a que son sometidos para lograrlo. ¿Estas prácticas son algo justo o sano?
Desgraciadamente, los ignorantes no contestan la pregunta anterior y saltan a abrir sus bocas sólo para criticar sin hacer nada al respesto. Se han escuchado acusaciones de que esta activista sólo quiere llamar la atención para ella, que es una ridícula, que sus protestas no sirven para nada. La señora Capalli está haciendo el trabajo que tiene que hacer. Utiliza estas protestas en las que ha empleado el semidesnudo para llamar la atención del público general sobre estas prácticas nefastas en un país donde los medios de prensa están más entretenidos con los alborotos en el Capitolio o la Fortaleza o en los múltiples asesinatos que se dan en nuestro país. Sería excelente idea atacar las causas que han hecho de nuestras sociedades modernas cada día más insensibles y agresivas.
Otro comentario muy sonado es el de exigirle a Karla capalli que vaya a tal pueblo a recoger los perros que están sueltos, o que hay animales muriendo de hambre y maltrato y se preguntan dónde está Karla. A estas personas entre las que se encuentra Luis Francisco Ojeda, si no van a ser parte de la solución no sean parte del problema. Hablen menos y hagan más. Si en nuestra comunidad hay perros hambrientos nuestro deber es ayudarles.
Es curioso ver cómo se critica a la antigua Roma por los espectáculos de gladiadores. ¿Acaso hoy día no existen estas prácticas bárbaras un poco perfumadas? Sólo hay que aclarar un hecho, las peleas de boxeo, de perros o gallos tienen una gran diferencia entre sí. Los boxeadores tienen el derecho a aprobar su participación en una pelea, los perros y gallos NO.
Por otro lado la inmensa mayoría de esta gente que critica son los que se proclaman cristianos y hablan de perdón, amor y las criaturas de la creación de Jehová. Como es común en ellos sólo hablan y pocos ponen en práctica sus prédicas. Todos tenemos la chispa divina en nuestro interior, por lo tanto todos somos seres sagrados que merecemos respeto.
La mayoría de las corrientes paganas se distinguen presisamente por el profundo amor a los seres con quienes compartimos la Tierra, todos tienen la esencia divina, todos tienen espíritu. A Karla Capalli le desamos éxito y al pueblo puertorriqueño le pedimos que la escuche y no apoye este tipo de espectáculos sin fines positivos, tontos y sobre todo violentos, aunque la violencia se dé tras las cortinas del circo, en la prisión eterna de estos seres.
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